Puente del Diablo en Cividale

No se pierda

Justo al lado del puente es posible descender hasta la orilla del río. Desde aquí podrá admirar el puente y el desfiladero desde un nuevo punto de vista. Pero también puede observar de cerca la roca sobre la que descansa el pilón central del puente. Parece ser que esta roca fue traída por la madre del diablo. De hecho, los habitantes de Cividale recurrieron al diablo para construir el puente, que lo terminó en una sola noche a cambio del alma de la primera persona que lo cruzara. En cuanto el puente estuvo listo, los ciudadanos hicieron... que lo cruzara un perro. El diablo, derrotado, petrificó al animal de rabia.

Un poco de historia

Construido en piedra a partir de 1442 y dividido en dos arcos, descansa sobre un peñasco natural en el lecho del río Natisone. El puente descansa sobre tres pilas, con una luz de 48 m sobre dos arcos de diferente anchura, asimetría que se debe a la posición del peñasco sobre el que se apoya la pila central. Permaneció inalterado hasta 1917, cuando durante la derrota de Caporetto fue volado para frenar el avance enemigo, en vano. Fue reconstruido exactamente igual por los alemanes, que tardaron poco más de seis meses.

Curiosidad

Con motivo del centenario de la batalla de Cividale, en 2017 se celebraron una serie de actos conmemorativos. Para la ocasión, se creó una pintura anamórfica gigante en el suelo y los parapetos del puente, que representa su aspecto justo después de su destrucción en 1917. La obra fue creada por un equipo de artistas europeos de las naciones que estaban en guerra en aquel momento como señal simbólica de una paz renovada. Esta pintura, llamada "La voz de lo aparentemente efímero", con sus 570 metros cuadrados de superficie, es la mayor obra anamórfica creada en Italia y una de las mayores de Europa.