El Carnaval Tricarico

Tricarico inicia sus fiestas de Carnaval el 17 de enero, día en que se celebra San Antonio Abad, protector de los animales. A lo largo del día se celebra un desfile con las máscaras tradicionales del municipio de Tricarico, vinculadas a rituales de antiguo origen pagano que se mezclan con los cristianos. La procesión la abre la máscara del "Massaro", que viste ropas de cuero y sostiene un bastón y un rifle, encabezando el resto del cortejo formado por máscaras que representan toros y vacas que simbolizan la trashumancia de un rebaño, su migración estacional. Los toros son completamente negros con cintas rojas, las vacas llevan un sombrero de ala ancha cubierto por pañuelos con cintas de colores que les llegan hasta los tobillos. Todas agitan enormes cencerros que contribuyen al ambiente de fiesta salvaje. La procesión comienza al amanecer frente a la iglesia de Sant'Antonio Abate, tras lo cual se enciende una hoguera en honor del santo y, después de tres vueltas propiciatorias alrededor del edificio sagrado, comienza la procesión propiamente dicha, que atraviesa las calles del casco antiguo. Las otras máscaras que componen la procesión son las del Conde y la Condesa, propietarios de los rebaños. Durante el Martes de Carnaval, se repite el desfile de máscaras, la gente se reúne para compartir una comida, tras la cual comienza un nuevo desfile con las pintorescas carrozas de Carnaval, que son un elogio más a la naturaleza y a los animales. Entre las carrozas destaca la de la Quaremma (Cuaresma), sobre la que se coloca una gran marioneta que representa el Carnaval. El recorrido termina en la plaza Garibaldi, donde se quema la marioneta, mientras la máscara de Quaremma -la esposa del Carnaval- llora su muerte. Las celebraciones continúan con serenatas, conciertos y otros momentos de convivencia.